I write to you today, my union brothers and sisters, to announce my retirement as President of SEIU 1199 New England effective December 31, 2018.
I have served over 40 years at 1199 – that’s 44 and a half years to be exact – and it has been a tremendous privilege to be involved in the struggle for workers’ rights and for the advancement of health care workers in Connecticut, Rhode Island, and throughout the country. In this fight, it has been an honor to take a unified stand with you in the movement towards social justice as we seek to put an end to racial and economic discrimination, to support immigrant communities and to demand equal rights for the LGBTQ community.
I feel proud to have worked with so many of you in leading organizing drives resulting in over 15,000 additional workers joining our union ranks. I feel proud about fighting by your side to get bosses to pay workers what you deserve, even when these same bosses didn’t want to pay out fair living wages. And I am proud of marching with you, leading strikes to stop bosses from taking hard-fought resources away from 1199 members.
District 1199 is a union mostly of women and people of color. We represent workers in an industry that has been sadly devalued for a very long time. Whether it’s in the public sector or private sector, long-term care or acute care, home care, nursing homes, hospital care, addressing needs of people with disabilities and mental health issues, too often we have found that the good people behind these heroic jobs are treated as if you were invisible. That is why the union works and will continue to work hard: to implement change by standing up for ourselves, our families and the people we care for. There’s a long tradition in 1199 to fight for fair wages and high quality standards of care, and I am confident this will go on. But we must remember there can be no economic justice without racial justice.
The challenges that we’re up against are substantial. Right-wing Republicans want to blame working people for every problem in society. Having a strong progressive union is even more important now than ever. Unity will make the world a better place, one that offers hope for a better life for all working people. I look forward to being on your side in future struggles.
Per union bylaws, current Secretary Treasurer and Organizing Director Rob Baril will assume the presidency through my remaining term. Rob has worked for 20 years in our union, organizing workers, training organizers and gaining valuable experience as he successfully led members through numerous strikes and contract negotiations. The Executive Board will be meeting soon to fill the Secretary Treasurer position vacated by Rob.
Rob will be a great president. He believes passionately in the mission of our union to improve the lives of members and your families and working people everywhere. You – the union officers, staff, delegates and members – will face down the continuous political, social and economic issues that lie ahead. Future generations are counting on the working class to push progressive agendas to improve not only our workplace conditions, but also promote improvements in general welfare, health, safety, education, financial stability and climate change. It’s up to you, it’s up to us.
Increasing funding for wages and benefits for nursing homes, and likewise for those members who care for people with disabilities, mental health challenges, or people at home are some of my life’s greatest achievements. We helped members in 19 nursing homes win a pension so they can finally retire with dignity. Of course, none of this happens without strong leadership from union staff and officers, but particularly never without the courage and determination of delegates and members. I will miss that daily work – the struggle and the fight. I will miss you. But know you’re in great hands.
Thank you again.
In solidarity,
Dave
Presidente del Distrito 1199 David Pickus se Retira a Fin de Año
Les escribo hoy, mis hermanas y hermanos de la unión, para anunciarles mi retiro como Presidente del sindicato SEIU 1199 New England, efectivo el 31 de diciembre de 2018.
He servido por más de 40 años en la 1199 – ya son 44 años y medio para ser preciso – y ha sido un gran privilegio estar involucrado en la lucha por los derechos de los trabajadores y por el avance de los trabajadores de la salud en Connecticut, Rhode Island, y a través del país. En esta lucha, ha sido un honor poder levantarnos de forma unida en el movimiento hacia la justicia social mientras buscamos ponerle fin a la discriminación racial y económica, apoyar a las comunidades inmigrantes y exigir igualdad de derechos para la comunidad LGBTQ.
Me siento orgulloso de haber trabajado junto a tantos de ustedes en los esfuerzos organizados que sumaron más de 15,000 trabajadores adicionales a las filas de nuestra unión. Me siento orgulloso de luchar a su lado para conseguir que los jefes paguen el salario que ustedes merecen por su trabajo, aun cuando esos mismos jefes no quieren pagar salarios justos. Y me siento orgulloso de marchar con ustedes, de dirigir huelgas para impedir que los jefes nos quiten los recursos por los que tanto hemos luchado nosotros los miembros de la 1199.
El Distrito 1199 es una unión mayormente de mujeres y personas de minoría. Representamos trabajadores en una industria que lamentablemente ha sido desvalorizada durante mucho tiempo. Ya sea en el sector público o sector privado, cuido extendido o agudo, cuido en el hogar, asilos, cuido en hospitales, o atendiendo las necesidades de personas con discapacidades físicas o mentales, demasiadas veces hemos hallado que la gente buena detrás de estos trabajos heroicos es tratada como si fuera invisible. Por esta razón, la unión trabaja fuertemente y seguirá trabajando: para implementar un cambio al ponernos de pie para reclamar nuestros derechos, y velar por nuestras familias y por la gente que cuidamos. En el sindicato 1199 existe una larga tradición de luchar por salarios justos y por elevar los estándares en la calidad del cuido, y confío que así seguiremos. Pero tenemos que recordar que no puede haber justicia económica sin justicia racial.
Los retos que enfrentamos son sustanciales. Los Republicanos derechistas quieren culpar a la clase trabajadora por todos los problemas de la sociedad. Contar con una unión progresista es más importante ahora que nunca. La unidad nos ayudará a crear un mundo mejor, uno que ofrece la esperanza de una vida mejor para todas las personas trabajadoras. De mi parte, saben que estaré a su lado para seguir luchando en el futuro.
Según el reglamento de la unión, el Secretario Tesorero y Director de Organización Rob Baril asumirá la presidencia durante mi término restante. Rob ha trabajado durante 20 años en nuestra unión. Ha organizado trabajadores, ha entrenado organizadores y ha adquirido experiencia valiosa mientras logró ser exitoso como líder de nuestros miembros en múltiples huelgas y negociaciones de contrato. La Junta Ejecutiva se reunirá pronto para llenar la posición de Secretario Tesorero dejada vacante por Rob.
Rob será un gran presidente. Él cree apasionadamente en la misión de nuestra unión para mejorar las vidas de nuestros miembros y sus familias y de la gente trabajadora donde quiera que estén. Ustedes – los oficiales de la unión, empleados, delegados y miembros – van a enfrentar los continuos temas políticos, sociales y económicos que nos esperan adelante. Las generaciones futuras cuentan con la clase trabajadora para impulsar agendas progresistas que mejoren no solo nuestras condiciones en el lugar de trabajo, sino también promuevan mejoras en el bienestar general, la salud, seguridad, educación, estabilidad financiera y en el cambio climático. Dependerá de ti, dependerá de nosotros.
Aumentar los fondos para los salarios y beneficios en nuestros asilos, e igualmente para aquellos miembros que cuidan de las personas con discapacidades físicas y mentales, o personas en el hogar son algunos de los mayores logros de mi vida. Ayudamos a los miembros de 19 asilos a obtener una pensión para que finalmente puedan retirarse con dignidad. Por supuesto, nada de esto puede ocurrir si no contáramos con un liderato fuerte de los empleados y oficiales de la unión. Extrañaré ese trabajo diario – la lucha y la batalla. Les extrañaré a ustedes. Pero sepan que quedan en muy buenas manos.
Muchas gracias otra vez.
En solidaridad,
Dave